Debido a su metabolismo más lento y a que se vuelven menos activos, los perros mayores queman menos energía y por lo tanto, necesitan menos calorías. En cambio, una fuente de proteínas de buena calidad y fácil digestión, es más importante que nunca ya que ayuda al perro a mantenerse en una buena condición física global y a conservar su masa muscular.
Una alimentación adecuada para un perro mayor debe proporcionar proteínas concentradas de buena calidad, poca grasa y glúcidos fáciles de digerir para aportar energía. Los principales minerales mantienen las envejecidas articulaciones, y las vitaminas, asociadas a las proteínas, ayudan a luchar contra las infecciones a las que el cuerpo puede ser más vulnerable debido a que el sistema inmunitario se debilita.
Los alimentos preparados para perros de edad avanzada están formulados para reflejar estos cambios en las necesidades nutricionales y los hábitos alimentarios. Los trocitos más pequeños también pueden ayudar a tu perro a aprovechar lo mejor posible su comida. Un contenido más rico en carne ayuda a estimular el apetito. De esta forma tu perro puede seguir disfrutando sus comidas, sin comprometer los elementos esenciales que necesita.